El uso racional del medicamento (URM) implica que los pacientes reciben la medicación adecuada según sus necesidades clínicas, en las dosis correspondientes a sus requisitos individuales, durante un período de tiempo adecuado y al menor coste posible. Los medicamentos se deben utilizar de manera segura, eficaz y económica.
Medicamentos recetados
La OMS estima que más del 50% de medicamentos se recetan, dispensan o venden de forma inadecuada
Medicamentos consumidos
El 50% de los pacientes que los toman lo hace de forma incorrecta, según los mismos datos de la OMS
Factores que influyen en el uso irracional de medicamentos
De acuerdo a la OMS
Conocimientos
Falta de conocimientos, habilidades o información independiente de los profesionales sanitarios. A menudo la información proviene exclusivamente de la industria farmacéutica y puede ocurrir que ésta sea parcial o interesada.
Mecanismos de control
Los mecanismos de control de los gobiernos no son suficientes para evitar la venta excesiva e inadecuada.
Personal sanitario
Exceso de trabajo del personal sanitario. Poco tiempo para la formación y para revisiones adecuadas a los pacientes, lo que puede ocasionar diagnósticos y tratamientos deficientes.
Publicidad
Promoción inadecuada de medicamentos. Muchos fármacos están al alcance de la población sin que se pueda garantizar la correcta asistencia sanitaria.
Ánimo de lucro
Ventas basadas en el ánimo de lucro y no en la promoción de un bien esencial.
Accesibilidad
Medicamentos inaccesibles. Los pacientes no pueden cumplir el tratamiento, ni buscar alternativas.
Políticas coordinadas
No existen políticas farmacéuticas nacionales coordinadas para monitorear y reglamentar el uso a todos los niveles y que favorezcan la capacitación de los profesionales.
Recomendaciones para asegurar un URM:
Legislación
La promulgación de leyes y normativas nacionales relativas a los productos farmacéuticos en las que prevalezca la salud de su población
Coordinación
La elaboración de Programas de URM coordinados a nivel nacional tanto en sectores públicos como privados
Comprobación
La toma de decisiones clínicas basadas en la evidencia, estableciendo canales externos de comprobación sobre nuevos medicamentos que informen a profesionales sanitarios de forma científica e imparcial, no permitiendo que sean los laboratorios productores los únicos que transmitan la información y los promocionen
Financiación
Asegurar la financiación suficiente para garantizar la disponibilidad de medicamentos y personal sanitario